Esta experiencia en Tercera Ola me ha impactado de muchas maneras, tan solo el hecho de ver caminando en los pasillos a líderes de diferentes partes del mundo, es de mucha bendición para mí, me hacen pensar que no estoy sola en este increíble ministerio llamado JNI.
Conocer los contextos de todos los presentes fue emocionante, pero aún más, oír, ver y sentir que Dios nos ha unido a todos con una misma pasión de servicio a nuestro ministerio y llamado personal.
Cada conversación con cada persona que hubo en ese lugar, fue un viaje a la cultura de su país y una conexión increíble con su llamado, y eso definitivamente marcó mi corazón; conectar las visiones y sueños que Dios nos ha dado, ha reforzado la esperanza de construir un futuro mejor para las nuevas generaciones de jóvenes que vienen atrás de nosotros.
¡Definitivamente hemos visto el mover del Espíritu Santo en cada uno de los que participaron en Tercera Ola, cada enseñanza nos ha motivado a no temer a los retos, a encender nuestra pasión por servir con más fuerzas, a comenzar algo grande en el nombre de Jesús!
¡En fin, estoy agradecida con Dios por su amor, por su respaldo y por hacerme ver que en cualquier parte del mundo donde yo este, Él también estará conmigo!