La noche del 24 de diciembre, mientras muchos compartían una cena con su familia esperando la navidad, un grupo de 12 personas de la Iglesia del Nazareno, Río Abajo, en Panamá, se reunía para salir a las 12:00 de la noche y compartir una cena y una bebida caliente con personas que estaban en las salas de espera y en los alrededores de los hospitales, Santo Tomás, y el Hospital del Niño, Doctor José E.
Unas 125 personas recibieron alimentos, chocolate caliente, y palabras de esperanza, basadas en la palabra de Dios, especialmente las madres que tenían a sus hijos hospitalizados. También se compartió alimentos con personas habitantes de la calle.
“Fue una experiencia agradable ver cómo un plato de comida y un chocolate caliente puede dar un poco de alegría y calor a las personas que están lejos de su hogar, y al mismo tiempo, compartirles la palabra de Dios”. Dijo Amable Polanco, pastor de la Iglesia del Nazareno, Río Abajo. “La gloria sea para Dios que pone el querer como el hacer en cada uno de los hermanos”.
El pastor Polanco, dijo que sintió la necesidad de llevar alimentos a las personas que pasarían la navidad lejos de su hogar. Así que formó un equipo en el que participó el chef Jesús Vera y unas 19 personas que colaboraron en diferentes momentos y áreas.
El equipo repartió los alimentos desde las 12:00 de la media noche del 24, hasta las 2 de la mañana del 25 de diciembre.
El pastor Polanco dijo que los que apoyaron la actividad dejaron de compartir un tiempo familiar para llevar el amor de Dios a los más necesitados.
“La primera en ser bendecida fui yo, porque Dios me permitió ser de bendición a muchas otras personas, que con gran alegría recibieron la cena. Además, aprovechamos la oportunidad de compartir el mensaje de salvación y ellos lo escucharon muy atentos”. Dijo Rosa Bejarano, participante y miembro de la iglesia Río Abajo.
También el pastor Fish Moriti compartió: “Pudimos compartir comida con personas habitantes de la calle, y ellos aceptaron que oráramos por ellos. Así pudimos mostrarle el amor de Dios a las personas”.
El pastor Polanco afirma: “Es mejor servir que ser servido. Ver en los rostros fríos y sin esperanza una sonrisa”
Fuente: Amable Polanco, pastor de la Iglesia del Nazareno, Río Abajo, Panamá.
