El año 2025 comenzó con el entrenamiento intensivo de Génesis en República Dominicana, preparando a tres jóvenes apasionados por la misión: Emanuel Guerrero de Honduras, Icsa Taisigue de Nicaragua y Teresa De Cuesta de México, quien ya había participado previamente en Génesis. Este proceso de formación contó con el valioso apoyo logístico de Marco y Eunice Portillo, del Noreste de México. Eunice, quien sirvió como misionera en Génesis anteriormente, ahora acompaña junto a su esposo y su hija de tres años como “padres de la casa Génesis”, brindando guía y asegurando el buen funcionamiento del entrenamiento.

Durante su preparación, se abordaron temas fundamentales como plantación de iglesias, trabajo en equipo, visión regional, liderazgo, seguridad, cultura, misión urbana y los principios esenciales de la Iglesia del Nazareno. Además de las sesiones teóricas, tuvieron experiencias prácticas que fortalecieron su formación ministerial.

“Hemos sido desafiados, pero también he recordado que Dios es el Señor de la obra”, dijo Teresa De Cuesta.

El equipo dedicó un día a servir en la comunidad de Los Alcarrizos en Santo Domingo. A pesar de las diferencias culturales, lograron conectar con los residentes, compartir el mensaje de Cristo y ser testigos de su amor a través de actos de servicio.

“Cada reto, servir en la cultura, escuchar los desafíos, junto con toda la amplia gama de oportunidades y estrategias recibidas, me motiva… Una frase que enfatizó Sugey en la charla de La Ciudad quedó en mi corazón: ‘No empezamos desde cero, solo nos unimos a lo que Dios ya está obrando en la ciudad’,”. Dijo Emanuel Guerrero.

Otro aspecto destacado de su entrenamiento fue la oportunidad de visitar diversas iglesias en Santo Domingo, donde compartieron sus testimonios y la obra que Dios ha hecho en sus vidas.

Así mismo, un momento práctico especial fue el operativo médico realizado el 8 de febrero en colaboración con el equipo de Ministerios Nazarenos de Compasión de República Dominicana. Aprovechando sus habilidades profesionales – Emanuel como dentista, Icsa como médico general y Teresa como enfermera – sirvieron a la comunidad de Bonao, llevando atención médica y reflejando el amor de Cristo. Aunque su misión no estará enfocada en la medicina, esta experiencia les permitió trabajar en equipo y servir en un contexto intercultural.

Un Llamado a la Oración y al Apoyo

Ahora más que nunca, estos jóvenes necesitan el respaldo en oración de la iglesia. La coordinadora regional de Génesis hace un llamado a la iglesia a orar por las nuevas iglesias que serán plantadas en El Salvador, por relaciones interpersonales sólidas, por su adaptación, sus familias a la distancia y por la provisión de Dios en cada paso.

También, agradece a los que enviaron una ofrenda para Génesis el mes pasado. Este entrenamiento fue posible gracias a la generosidad de muchas congregaciones de la región. Si deseas ser parte de esta misión, puedes contribuir para cubrir sus gastos de visa, residencia o apoyar directamente su meta financiera durante los próximos dos años de plantación de iglesias.

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Fuente: Erika Chaves, Coordinadora Regional de Movilización Misionera y GÉNESIS.