4 Razones Por Las Que El Potencial De La Iglesia Es Más Fuerte Que Nunca

Por Dan Reiland

La asistencia es simultáneamente uno de los temas más y menos hablados en la iglesia hoy en día. Los líderes quieren hablar de ello, pero dudamos en mencionarlo en las reuniones, casi como si no fuera lo correcto.

¿Cómo contamos, qué se cuenta, y algunos incluso se preguntan: debemos contar como lo hemos hecho en el pasado?

Quizá la pregunta más importante sea ¿por qué llevamos la cuenta de la asistencia?

¿Qué significan los cambios en los patrones de asistencia?
¿Hacia dónde se dirige la Iglesia?
¿Cuál es la mejor estrategia para el Reino?
¿Cuáles son las repercusiones a largo plazo de la Iglesia Híbrida?

¿Tiene problemas la Iglesia? No, si estamos dispuestos a seguir cambiando. De hecho, creo sinceramente que nuestros mejores días están por llegar.

Sin embargo, los cambios que hagamos para el futuro de la Iglesia no deben ser reaccionarios. La defensa por sí sola nunca gana el partido. Debemos arriesgarnos a permanecer en la ofensiva para conquistar nuevos territorios.

Podemos dejar de preocuparnos por el tamaño de la iglesia y centrarnos más en la fuerza de la iglesia. Esa idea lleva agitándose mucho tiempo. La fuerza conduce al crecimiento. Centrarnos en la fuerza de la iglesia en lugar de en la asistencia cambiaría nuestra forma de dirigir y lo que hacemos.

No me malinterpreten; siempre nos preocuparemos por la asistencia porque es importante. Una persona le importaba a Jesús, así que una persona sigue importando.

Los líderes de la Iglesia están empezando a medir los resultados de manera diferente. Medir diferentes resultados nos lleva a enfatizar diferentes ministerios de diferentes maneras.

La razón por la que siempre me preocuparé por la «asistencia» es que quiero llegar a más personas con las buenas nuevas de Cristo de una manera que cambie sus vidas. La cuestión es cómo la gente se involucra en la iglesia hoy en día, no es lo mismo.

Necesitamos iglesias pequeñas, medianas, grandes y enormes. El propósito de Dios no puede ser limitado o contenido en nuestras ideas, métodos y sistemas. Un método no funciona si nuestra meta es alcanzar a todos los pueblos.

Iglesia híbrida, micro iglesia, grupos en línea, asistencia en persona, y aún no hemos imaginado lo que vendrá después.

El alcance y el impacto son más importantes que el tamaño, pero nunca podemos permitir que eso se convierta en una excusa para la falta de celo o para caer en una zona de confort. El cambio de vida siempre ha sido la verdadera medida de una gran iglesia.

La Iglesia está cambiando, pero su potencial es mayor que nunca. La forma en que pensemos y dirijamos influirá en nuestros resultados.

4 razones por las que la iglesia tiene un gran potencial:

1) Nunca se ha tratado de la organización.
Siempre se ha tratado del cuerpo de Cristo, no de una organización. Sin embargo, la Iglesia como la conocemos fue idea de Dios. Dios permitió que el reino sobrenatural invadiera el reino natural. El sabía que eso era necesario para alcanzar a las personas donde se encuentran.

Dios nos permitió «organizarnos» para que pudiéramos adorarlo más efectivamente, cuidarnos unos a otros y alcanzar a otros que no creen.

La iglesia como organización es defectuosa. No podemos escapar de ello ni excusarnos. Debemos aceptarlo y mejorarlo. Las iglesias de Éfeso, Corinto, Galacia, Tesalónica – y muchas más, eran todas defectuosas. Eso no detuvo a la iglesia primitiva.

Tenemos que levantarnos cada mañana y liderar el cambio, para que la iglesia sea más eficaz.

Es sabio recordar que Jesús es la única conexión real que sostiene la identidad y el propósito de la Iglesia a través de todo el cambio.

¿Cómo está cambiando y mejorando su iglesia gracias a su liderazgo?

2) El mundo digital está aquí para quedarse, pero nunca sustituirá a las relaciones a nivel de alma.
Estamos aprendiendo. Las iglesias están mejorando en las conexiones digitales. Nos estamos poniendo al día. Hace casi veinte años que las parejas se encuentran y se casan a partir de una conexión digital. La tecnología también nos ayuda a mantenernos conectados.

Lo digital es la nueva relación, un nuevo tipo de relación. Pero en algún momento, en las relaciones, los seres humanos están diseñados para establecer contacto.

El anhelo de intimidad a nivel del corazón está entretejido en nuestro espíritu. La tecnología puede ayudarnos a conectarnos y a mantenernos conectados, pero hay un espacio en las relaciones en el que los seres humanos necesitan una conexión con el alma. La iglesia local es realmente buena en eso.

La tecnología también tiene sus limitaciones. ¿Quién iba a decir que el desarrollo de software y los equipos podían costar tanto? Habrá un día en que necesitemos una respuesta mejor, incluso dentro de nuestras mejores respuestas.

La buena noticia es que todavía se puede conseguir una taza de café barata y que hay algo profundamente significativo en la conversación cara a cara. La Iglesia lo hace bien.

3) La cultura actual necesita más que nunca respuestas reales.
Aquí no hay necesidad de comentarios sociales detallados. Es evidente. Hemos perdido el rumbo. No es ni remotamente una interpretación política; es simplemente la realidad. Hemos perdido una conexión compartida, una causa unificadora y un verdadero norte. La división manda.

El sálvese quien pueda nunca funciona. La gente sufre, algunos en silencio y otros abiertamente, y las necesidades generales son grandes. Ahora nos necesitamos más que nunca.

La Iglesia tiene una oportunidad increíble de llevar esperanza y unidad a una cultura que sufre. Las oportunidades de colaboración práctica son abundantes. Su iglesia puede asociarse con escuelas, cooperativas de alimentos, clínicas médicas, agencias de recuperación, refugios para los sin techo, empresas y la lista continúa.

Ninguna iglesia puede o necesita asociarse con todas ellas; usted puede elegir algunas o sólo una. Puede que su asistencia no aumente inmediatamente, pero su impacto sí lo hará, lo que fortalecerá su iglesia y, con el tiempo, provocará su crecimiento.

Su iglesia fue diseñada para operar, y funcionar en misión fuera de sus «4 paredes». Y como siempre, el impacto más significativo y potencialmente eterno es de uno a uno.

La Iglesia es la mayor fuerza en la tierra para impactar positivamente la cultura actual. ¿De qué manera está usted aprovechando sus oportunidades para impactar en su comunidad?

4) Existe un gran impulso en la Iglesia actual.
Cuando observamos la Iglesia cristiana en todo el mundo, vemos que existe un gran impulso. Lo sabemos en parte porque hay resistencia. Dondequiera que haya progreso, siempre habrá resistencia.

Esa es una gran pregunta para su iglesia.

¿Dónde está su resistencia?

¿Se trata de tomar un nuevo territorio del Reino o de conflictos internos?

La gente acude a la iglesia cuando está herida y no encuentra respuestas en ningún otro sitio. La gente necesita que la vida tenga sentido y en muchos aspectos no lo tiene.

Depende de nosotros no sólo estar preparados, ser pertinentes y estar disponibles para ayudar a satisfacer las necesidades, sino también salir de nuestras iglesias para encontrar a quienes necesitan el amor de Dios.

El impulso se alimenta del amor. El impulso requiere liderazgo, pero nuestra expresión del amor de Dios es el fundamento de la iglesia.
Esto es para lo que fuimos diseñados y libera nuestro gran potencial.

Traducido por: Elizabeth Guevara Cabrera.